ENFERMEDAD DE ALZHEIMER

La enfermedad de Alzheimer (EA) es la más frecuente de todos los tipos de demencias. La EA es una enfermedad multifactorial asociada a diversos cambios neuropatológicos objetivándose la presencia de placas de amiloide y ovillos neurofibrilares en el tejido cerebral. Estos cambios producen una perdida neuronal que inicialmente comienza a afectar en los lóbulos temporales, en concreto a unas estructuras denominadas hipocampo y corteza entorrinal, dando lugar a la alteración de la memoria reciente que presentan los pacientes que padecen la enfermedad de Alzheimer. Posteriormente, las lesiones cerebrales se extienden a áreas de asociación parietoccipitales para finalmente acabar afectando a todo el cerebro.

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La enfermedad de Alzheimer comienza de una manera insidiosa y tiene un curso progresivo. La duración de la enfermedad entre el diagnóstico y la fase final suele ser de unos 7 años aunque en algunos casos supera los 12 años y otra mueren a los 3 o 4 años del diagnóstico. La aparición de la enfermedad suele ser a partir de los 65 años aunque también existen casos de inicio presenil cuya evolución suele ser más rápida.

El primer síntoma más marcado y que caracteriza a la enfermedad es una alteración de memoria reciente, de modo que es habitual que olviden conversaciones o acontecimientos ocurridos en los últimos días. En estadíos iniciales también se observan cambios de personalidad, problemas conductuales como la irritabilidad además de trastornos emocionales tales como ansiedad o depresión. Con posterioridad y de manera progresiva aparecen alteraciones de lenguaje, apraxias y agnosias. En algunos casos se pueden acompañar de alteraciones psicopatológicas como delirios o alucinaciones.